Antes de empezar a explicar cómo ahorrar hay que hacer una reflexión sobre la idea de que cumplir sueños va conectada directamente con la certeza de que la vida es finita. Lo sabemos, pero muchas veces lo obviamos inconscientemente aunque de vez en cuando reflexionemos sobre ello. Por ejemplo, cada vez que un año termina, todo el mundo se hace propuestas de cambio como apuntarse al gimnasio, ahorrar para cumplir un sueño; “este año va a ser el mejor” —solemos decir—. Este es un hecho que todos hemos vivido o escuchado alguna vez en nuestras vidas con propósitos de mejora que no se cumplen.
Para ser más gráfico sobre la importancia de ser conscientes de una realidad tan clara como que el tiempo es finito presentaremos a continuación un esquema que representa la esperanza de vida de una persona y su tiempo consumido. Si suponemos que esa esperanza puede rondar los 80 años (ojalá que sean más y con calidad de vida) podemos abstraer cuánto de ese tiempo hemos gastado y cuánto nos queda.
Es impactante, ¿verdad? Pero no nos deprimamos. Es tan importante ser consciente de esta información como saber que hay que hacer algo para afrontarlo. Al fin y al cabo el único momento importante es ahora. Y en eso nos vamos a focalizar empezando desde ya para saber cómo ahorrar para cumplir tus sueños.
Los consejos que presentamos a continuación son el resumen de lo que tendrás que hacer para cumplir tus sueños basados en nuestra propia experiencia.
Tabla de contenidos
PRIMER PASO: DECIR QUE SÍ SE PUEDE.
Si tu problema son las excusas como pensar que no tienes tiempo, no tienes dinero o tu situación personal no te lo permite vamos a empezar a demostrar que no es así. No hay excusas si se quiere hacer. Así que excusas fuera. Se puede y se debe. Solo hay que proponérselo. Pero, ¿cómo? Pues empezando por coger lápiz y papel para anotar lo que consideres importante para no acabar leyendo hasta el final sin recordar nada del principio. Así que toma lápiz y papel o una libreta en blanco y empecemos. Y recuerda: elimina de tu cabeza la idea de que es complicado o de que no hay nada que puedas cambiar. Piensa en la hoja de vida que te presenté al principio para motivarte positivamente.
SEGUNDO PASO: DEFINE TU OBJETIVO.
Define exactamente cuál es tu meta. Quiero ahorrar para viajar (si ese es tu caso esta entrada te vendría bien a ti), quiero ahorrar para dar una entrada de una casa, coche, un barco, lo que sea. Escríbelo ahora mismo.
Ahora haz un cálculo lo más real posible del coste de tu proyecto. (Dedícale un poco de tiempo): Cuánto cuesta en total. Cuánto tiempo crees que vas a tardar en conseguirlo. No te preocupes ni te desesperes aún. Estamos aproximando la idea y queda por ver los pasos para conseguirlo. Va a ser un proceso lento pero firme.
TERCER PASO: PARTE PRÁCTICA. EMPECEMOS A AHORRAR.
Ahora llega lo importante. De manera resumida se trata de:
• CONTROLAR TUS GASTOS.
• IDENTIFICAR Y REDUCIR AQUELLOS QUE CONSIDERES.
• Y HACER UN PRESUPUESTO.
CONSULTA PRESUPUESTO PARA VIAJAR DURANTE UN AÑO
Pero además en este paso te voy a presentar los trucos con los que vas a poder poner en marcha el ahorro. Recuerda que unos te servirán y otros no. Lo ideal es que vayas marcando los que vas a llevar a cabo porque habrá algunos que podrás descartar y otros simplemente se completarán de una sola vez. A partir de aquí todo lo que recaudes tendrá que ir para el ahorro, pero recuerda: tienes que comprometerte a cumplir a hacerlo. Veamos cómo lo vamos a hacer.
PARA CONTROLAR TUS GASTOS DIARIOS
Para hacerlo vamos a identificar en qué te gastas tu dinero. Puede parecer tedioso, pero esta es la única forma de cuantificar tus gastos. Además, hoy en día es más fácil que nunca con las apps. Tres formas de controlar tus gastos diarios. Elige la que prefieras:
MÉTODOS PARA CONTROLAR LOS GASTOS
APPS
Te recomiendo las Apps porque va a ser la manera más clarificadora de controlar tus gastos. Ejemplos:
Money Pro: Tiene una versión gratuita y una de pago y una suscripción mensual para conectar tus cuentas bancarias.
Fintonic: Personalmente es la que usamos. Es gratuita aunque usa publicidad de productos financieros, pero está bastante bien porque clasifica tus gastos por categorías. Hay que enlazarla con tu cuenta bancaria para obtener esos datos.
- HOJAS DE CÁLCULO
- LÁPIZ Y PAPEL
Papel y bolígrafo suele ser buena opción para quien prefiere el soporte físico.
Independientemente del método que elijas para organizar tus gastos debes tener en cuenta las siguientes categorías. Por eso recomendamos las Apps, porque ya tienen todos estos apartados:
- Piso o casa (alquiler, hipoteca, derramas)
- Servicios (luz, gas, agua, Internet)
- Supermercado (todo aquello que compramos en el supermercado)
- Transporte público
- Coche (gasolina y gastos relacionados)
- Ocio (actividades, restaurantes) • Compras (compras varias como ropa, objetos de casa o aparatos electrónicos)
- Viajes (todo lo relacionado con viajes) • Otros (donaciones, regalos, peluquería, blog) ¿Ya tienes claro cuál se adapta mejor a ti? Pruébalos todos para tomar contacto y elegir uno.
QUÉ HACER PARA IDENTIFICAR Y REDUCIR AQUELLOS QUE CONSIDERES UN GASTO SUPERFLUO.
Es decir, vas a decidir dónde se puede ahorrar. Para ello vamos a clasificar los gastos para tener más claro cuáles podemos eliminar decididamente y cuáles se van a poder reducir y optimizar. A grandes rasgos tendrás en cuenta los siguientes:
Gastos principales: Son los gastos que forman la base de tu estilo de vida y son difíciles de reducir a corto plazo. Son gastos fijos. En esta categoría se incluye el alquiler, la hipoteca, el transporte o los gastos de educación de los hijos (puede haber más, depende de tu estilo de vida).
Gastos secundarios: Son gastos que, aunque pueden ser importantes, tienes más margen para reducirlos o eliminarlos. Debes dividirlos en:
- Secundarios recurrentes: que se repiten en el tiempo: compra del supermercado, factura de la luz, gas, restaurantes, suscripciones…
- Secundarios puntuales: Gastos secundarios que ocurren de vez en cuando o de forma muy poco frecuente: compras puntuales, regalos, viajes, actividades…
Tu prioridad será reducir los gastos secundarios recurrentes. Serán aquellos gastos en que el valor aportado es prácticamente nulo. Algunos ejemplos de gastos a eliminar pueden ser:
- Suscripción al gimnasio al que no vas tanto como quisieras, pero que puedes hacer en casa.
- Servicios de vídeo y música en streaming que no utilizas (Spotify, Netflix, HBO, etc.).
- Seguros de móvil que no sean necesarios.
- Apps de suscripción mensual.
- Servicio de lavandería.
- El café o el desayuno en el bar.
- Tabaco.
¡No dejes que pase más tiempo! Ha llegado el momento de cumplir tus propósitos.
El siguiente paso es intentar reducir u optimizar los que no puedas eliminar.
Algunos ejemplos de optimización para ahorrar son:
- Reducir el consumo en gas, electricidad y agua, además de cancelar los servicios adicionales que te incluyen en los contratos (en el caso de la luz puedes bajar la potencia también).
- Contratar velocidad de Internet más económica.
- Comprar marcas blancas.
- Ir menos a comer fuera.
- Usar el transporte público o la bicicleta.
- Comprar ropa solo cuando la necesitas.
Debes tener presente el gasto que suponen e intentar buscar alternativas.
Para ello, estas preguntas te ayudarán a reflexionar sobre si puedes reducir los gastos:
1. ¿Necesitas realmente comprarte una vivienda?
2. ¿Podrías vivir en un piso más pequeño o en una zona más económica?
3. ¿Es necesario ir en coche al trabajo?
4. ¿Te hace más feliz un coche nuevo pagado a plazos que uno de segunda mano?
5. ¿Es muy importante llevar a tus hijos a un colegio privado?
6. ¿Necesitas una persona que te limpie la casa?
CUARTO PASO: BUSCA AUMENTAR TU INGRESO
Al igual que reducir, optimizar y eliminar gastos no debemos olvidarnos de buscar más ingresos
¿Cómo? Haciendo lo siguiente:
- Pide un aumento de sueldo
- Vende lo que no uses.
- Alquila tu plaza de garaje y/o tu trastero.
- Alquila alguna habitación.
- Alquila tu casa.
- Monetiza tu pasión: sé blogger o youtuber (requiere conocimientos, trabajo y constancia para obtener resultados).
- Crea un curso y véndelo en diferentes plataformas (requiere conocimientos, trabajo y constancia para obtener resultados).
- Invierte. Si tienes ahorros en tu cuenta corriente deberías ponerlos a trabajar. La inversión es la mejor fuente de ingresos pasivos.
QUINTO PASO: NUNCA TE DETENGAS.
Esta parte es vital: sin importar lo difícil que parezca, jamás te detengas.
En ocasiones parecerá que tu meta de ahorro para alcanzar tu sueño se alejará, otros días gastarás más dinero del que tenías pensado o simplemente habrá días donde no tendrás ganas de hacer nada. Es normal, te va a suceder y, cuando llegue el momento, lo importante es reconocer que es algo pasajero pero tú tienes que seguir adelante.
Pero se debe comenzar con pasos pequeños, manteniéndote motivado con tu objetivo en mente.
Si lo piensas bien en este momento solo tienes dos opciones: seguir haciendo lo que has estado haciendo los últimos años, o ponerte a trabajar en tu ahorro.
¿Qué te han parecido estos pasos para sabaer cómo ahorrar? ¿Tienes algún truco que utilices y funcione?